¿Es la gobernanza migratoria el nuevo paradigma del siglo XXI? Más allá de que no existe una única definición, la gobernanza se presenta como una ruta, una forma, un marco normativo que, en el ámbito de la migración internacional, es hoy definido principalmente por Naciones Unidas, en línea con los principales instrumentos internacionales, los pactos y el programa mundial para el desarrollo. Casi todos los discursos y las discusiones sobre política migratoria remiten de una u otra forma a dicho marco de gobernanza.
La gobernanza en la migración se ha construido como un tipo ideal, en términos de Max Weber, una manera de gestionar, de organizar y de planear la movilidad humana, un mecanismo que plantea la participación cada vez más amplia de diversos actores, no sólo de quienes gobiernan. Por eso la gobernanza está presente en todos los ámbitos, no hay lugar en donde no sea mencionada. En ámbitos como la cooperación internacional, la sociedad civil, la academia, los activismos, entre otros, es parte central de los programas de formación de especialistas en migración. Se la menciona como gobernanza global, gobernanza multinivel, gobernanza
local, gobernanza fronteriza. Su uso se ha vuelto un lugar común, pero su definición cada vez resulta menos clara, por lo que la reflexión abierta y crítica sobre las implicaciones que tiene, particularmente en los dere- chos humanos y la vida de las poblaciones es cada vez más necesaria.
La gobernanza, en los términos en que se ha ido delimitando en el ámbito migratorio, contiene las cuestiones éticas presentes en la tensión entre seguridad y libre movilidad, entre soberanía y globalización, cuyo punto de partida ha sido el establecimiento y transformación de las fronteras del Estado-nación. La imposibilidad de encontrar consenso en cómo definirla da cuenta de la emergencia de los cuestionamientos sobre su uso, las propuestas que se abren en el margen de su dominio y la influencia de los actores a los que da cabida en términos ontológicos.
Las Relaciones Internacionales le dieron fuerza a esta categoría y plan- tearon su uso no sólo como un aspecto normativo y político, sino tam- bién como categoría de análisis y modelo para observar la sociedad —véase Gobernanza local y (su propio) desarrollo—, ¿podríamos pensar, a partir de estos elementos, una gobernanza migratoria que, como pro- yecto político, incorpore aspectos más amplios de hospitalidad, cuidado, construcción de comunidades y de bienestar social? y que añada, no sólo una batería de indicadores difícilmente medibles ante la complejidad y heterogeneidad de los procesos sociales, sino otras alternativas de obser- vación en su implementación, ¿de qué manera o qué elementos podrían ser estos?
El objetivo que proponemos en este número del Boletín (Trans)fronteriza es promover un diálogo que vaya encaminado a buscar estas respuestas, un ejercicio abierto y libre entre distintos representantes y actores sociales de diversos sectores vinculados a la migración internacional para intentar buscar las respuestas a dichas interrogantes. Creemos que las respuestas, como la gobernanza misma, residen en ese diálogo, en la posibilidad de debatir de manera multidisciplinaria y multidimensional en torno a este paradigma en el ámbito migratorio.
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Trans-fronteriza no 18 : la gobernanza como modelo para observar la realidad migratoria y fronteriza : cuestiones éticas y epistemológicas / Gabriela Pinillos… [et al.] ; coordinación general de Gabriela Pinillos ; Roxana Rodríguez Ortiz ; editado por Yolanda Alfaro … [et al.]. – 1a ed. – Ciudad Autónoma de Buenos Aires : CLACSO, 2023.
Estudios Fronterizos 